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Este libro es para que lo lean los niños y los
no tan niños. Esta obra se presenta como un libro de espiritualidad para niños
y jóvenes y también para adultos. ¿Es necesario cultivar el alma de los niños,
de los jóvenes? Estamos en un mundo que a pasos agigantados se separa de Dios.
Vivimos en una cultura, en un momento, en la post modernidad, en un ambiente
que ahoga la presencia de Dios. Se pregona una educación laica que quiere
eliminar todo vestigio religioso en el campo de la sociedad. Es decir, nuestros
niños se van a criar en un ambiente que no es cristiano. Los valores, la moral
cristiana, será reducida por la sociedad al fuero interno de las personas.

¿Serán nuestros hijos fuertes ante la presión a la que el mundo los pondrá? La
concuspicencia de la carne, la jactancia de las riquezas y los ídolos .
Nuestros hijos, nuestros pequeños, están inmersos en un mundo alejado de Dios.
Es necesario que haya en esta balanza una fuerte oposición, un muro que contenga
las embestidas de la bestia que es descrita en el Apocalipsis como un dragón
que se levanta y que de su boca echa ríos que inundan la Tierra.

¡No está todo perdido! Jesucristo ha dicho: “Yo estoy con vosotros hasta el fin
del mundo”. Tenemos una fortaleza para resistir a las acechanzas del diablo: La
familia cristiana, el lugar donde los hijos reciben la fe, la Iglesia, la
comunidad, el lugar donde la familia con los hijos se nutren de la fe, reciben
los sacramentos. Para ayudar a los hijos, a los jóvenes, a la próxima
generación es necesario que la Iglesia transmita la fe a las familias para que
estás a su vez transmitan la fe a los hijos. Una dualidad indestructible
familia-Iglesia, familia-comunidad cristiana. Lugar donde los padres reciben la
fe y donde los hijos reciban el mandato dado por Dios en el Monte Sinaí: “Esto
se lo enseñarás a tus hijos”
Este libro es para los niños. Escrito en un lenguaje poético se les habla del
ángel de la guarda. Se presentan pequeños poemas que pueden ser oraciones al
ángel de la guarda. En estas oraciones al ángel de la guarda se quiere cultivar
la vida espiritual de los niños, que piensen en Dios, en el cielo, que tengan
deseos de amar a Jesús, de amar a la Virgen, deseos de ser Santos, de vivir en
la presencia de Dios, de combatir el buen combate de la fe.

El libro ha sido prologado por Don Rafael Zornoza Boy, obispo de Cádiz y Ceuta
e ilustrado por Santiago Lopez Jover.


Los beneficios irán destinados a colaborar con el Seminario Diocesano Misionero
Redentoris Mater de Cádiz.

 


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